A finales del siglo XIX, Juan, un joven almeriense nacido en una acaudalada familia, decide abandonar su ciudad y su desahogada vida para entrar a trabajar en el ferrocarril. En su primer destino como jefe de estación conoce a su futura mujer, Agustina, con la que tendrá siete hijos. «Postales coloreadas» es la crónica novelada del periplo vital de Juan y de Agustina, padres de la abuela materna de la autora, y de sus hijos; una crónica que parte de Almería y llega a Zaragoza, con paradas intermedias en una pequeña aldea de la provincia de Orense, Vigo, Madrid y varios pueblos de la provincia de Teruel. A lo largo de esta narración, en la que se entrelazan pasado y presente, memoria e invención, lo que se dice y lo que se calla, certezas y suposiciones, y en la que aparecen diversos objetos con un gran poder evocador (postales coloreadas, fotografías de estudio, dos bastones con mango de plata, un azucarero, una talla de san Antonio, unos pendientes que en su origen fueron unos gemelos, entre otros), el lector será testigo de algunos de los acontecimientos que jalonan la vida de una familia cuya existencia está marcada por un padre acostumbrado a hacer su santa voluntad.